La Universidad del Tolima vivió un fin de semana violento, en el cual encapuchados atentaron contra la sede y cometieron actos vandálicos que dejaron pérdidas económicas en la estructura física.

Lo que comenzó como una manifestación enmarcada en el Paro Nacional, escaló hasta convertirse en una situación peligrosa para quienes transitaban, vivían en el área o se encontraban dentro de la institución.

Se reportaron daños en las mallas del campus donde personal externo a la Universidad ingresó de forma ilegal, quienes a su vez abrieron de forma violenta la entrada principal con ruptura de candados y cadenas, además de daños en puertas y en lockers.

“Lo ocurrido en el campus de Santa Helena desde luego atenta y viola los protocolos de bioseguridad que el alma máter ha adelantado, va en contravía de todos los esfuerzos que la Universidad ha logrado y viene generando para proteger a cada uno de los miembros de la comunidad universitaria”, expresó el profesor Diego Polo, vicerrector de Desarrollo Humano de la UT.

Así mismo, Polo añadió que la institución respeta la libre manifestación y la protesta social, pero rechazan cualquier acto de violencia que atente contra la dignidad y la vida humana, e invitaron a que en el futuro, en estos mismos espacios, se respete la vida y los derechos humanos.