Los seguidores del equipo decidieron hacer un mural con el que pretenden dejar claro que el coloso es de la ciudad y debe llevar los colores que representan la tierra y no a un partido político.

La iniciativa nació del grupo de los de la 37, quienes

 preocupados por la posibilidad del color azul en el Murillo Toro, decidieron decir presentes y aprovechar algunos espacios de los alrededores para hacer murales que lo identifiquen con el Vinotinto y Oro.

Los barristas afirman, además, que los murales quieren cambiar la cara de este sector de Ibagué, afectado por el gran número de consumidores de estupefacientes que lo rondan, gracias a los expendios de droga que proliferan en el sector.

“El Estadio es del equipo y así debe ser. El Alcalde lo está remodelando por dentro, pero por fuera nosotros estamos ayudando a embellecerlo y a mejorar su aspecto y el del sector que normalmente está lleno de basura”, aseguró Fabián Reina, quien lidera la pintada del mural.

Los barristas esperan que la Alcaldía respete su trabajo y lo incorpore como parte de las adecuaciones que se adelantan en el Estadio.