Según la denunciante, ante el nulo servicio del personal de enfermería, la ciudadana manipuló la camilla donde estaba su hija y se fracturó un dedo.

Un hecho particular conoció las Noticias de Ondas de Ibagué, el cual tiene que ver con la prestación en el servicio de urgencias en la clínica Nuestra Señora del Rosario, donde una mujer arribó con su hija de 17 años para recibir atención médica.

Paola Clavijo, madre de la paciente, señaló que las remitieron de la EPS Salud Total a dicho centro asistencial en la madrugada de este martes, en el que hubo demoras en su atención y presentaba fiebre además de apendicitis.

Sin embargo, mientras realizaban la espera en urgencias y ante la aparente falta de personal de turno, su hija le pidió cuadrar la silla en una mejor posición y al manipular la camilla, sufrió afectación en uno de los dedos de su mano.

“Mi hija no fue atendida correctamente por las enfermeras, hay muchas pero no están pendientes de los pacientes, me pidió que le bajara la camilla, porque la posición en que estaba le dolía mucho, entonces yo sin tener ningún conocimiento del manejo trate de bajarla y lo que pasó es que se me cayó en un dedo, lo tengo fracturado y deben hacerme cirugía. Estoy hospitalizada por esa fractura en mi dedo por estar haciendo labores que debe hacer una enfermera”.

Asimismo, cuestionó el servicio en dicha área de la clínica, en el que además de las extensas esperas, el trato por el personal que labora no es el idóneo.

“Aquí lo tiran a uno como si fuera un animalito, le ponen algo y ya esperar varias horas para que pase un médico, no nos tratan como personas que venimos por un servicio”.

Clavijo expuso que “mi hija venía por una apendicitis y por retrasar el procedimiento le dio una peritonitis, se le regó el líquido y tuvieron que intubarla, por negligencia de la clínica, porque es un pésimo servicio y eso que uno lo está pagando”.

Finalmente, aseveró que está a la espera de valoración para pasar a cirugía del dedo afectado.