¡Golpe ambiental! Petrobras anunció la cancelación de actividades exploratorias del proyecto Himalaya en Villarrica

por Ondas de Ibagué

El proyecto petrolero de Galilea en Villarrica, siempre fue calificado por los líderes ambientalistas como un riesgo ambiental para el oriente del Tolima. Por medio de este proyecto, la empresa Petrobras buscaba explotar el terreno en búsqueda de petróleo.

El alcalde de Villarrica, Julio Cesar Pérez, afirmó que en las últimas horas recibió una misiva, donde se le informaba que la empresa que estaba realizando exploraciones en Galilea, cancelaba esta actividad.

“Hemos recibido de la empresa Petrobras el comunicado, donde se cancelan las actividades exploratorias del proyecto Himalaya en nuestro municipio y más efectivamente en nuestra vereda Galilea”, contó Pérez.

El burgomaestre informó que la compañía que por varios años buscó que se le fuera autorizada su licencia por la ANLA y que posteriormente le fue aprobada, dejaría su búsqueda exploratoria y los trabajos que claramente ya tenían adelantados en el lugar.   

“La empresa Petrobras que hasta hace unos días venía haciendo intervenciones en esta reserva forestal, hoy se ha visto abocada a cancelar las actividades que se tenían previstas y planificadas para la perforación del pozo exploratorio Himalaya 1”, resaltó el mandatario.

   

La decisión

Se conoció que el Programa Socioambiental de la Corporación Podion, radicó ante la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (ANLA) una solicitud para que la autoridad ambiental reconozca que la licencia otorgada al proyecto Área de Interés de Perforación Exploratoria – AIPE – Villarrica Norte perdió todos sus efectos jurídicos con ocasión de la declaración del Parque Natural Regional (PNR) Bosque Galilea mediante Acuerdo 031 de 2019.

Específicamente la Corporación Podion solicitó a la ANLA que declare la pérdida de ejecutoria de la Resolución 1564 del 27 de diciembre de 2004 y sus posteriores modificaciones, a través de las cuales se autorizó un proyecto de exploración petrolera en un polígono de 12.628 hectáreas pertenecientes a los municipios de Villarrica y Dolores (Tolima), comprometiendo gravemente la extraordinaria biodiversidad del bosque de Galilea, como lo viene denunciando la comunidad de tiempo atrás.  La Corporación puso esta solicitud también en conocimiento de la Corporación Autónoma Regional del Tolima (Cortolima) y la Procuraduría General de la Nación.

Es de aclarar que la pérdida ejecutoria, conocida también como decaimiento administrativo, es una excepción a la obligatoriedad de los actos administrativos que opera cuando desaparecen los fundamentos de hecho o de derecho que dieron lugar a su expedición.

El principal argumento de la Corporación para el caso concreto es que al cotejar las coordenadas de las áreas del AIPE Villarrica Norte y el PNR Bosque de Galilea se evidencia que casi la totalidad del polígono petrolero se encuentra dentro del Bosque de Galilea, comprometiendo cerca del 60% del área protegida. Así, teniendo en cuenta que en áreas de PNR se prohíbe cualquier actividad distinta a la “preservación, restauración, conocimiento y disfrute”, incluyendo por supuesto las actividades extractivas, han desaparecido los fundamentos jurídicos de la licencia ambiental otorgada y, por tanto, esta no puede ser ejecutada.

Valga recordar que la licencia ambiental fue otorgada inicialmente a la empresa Nexen Petroleum y luego cedida a la gigante brasilera Petrobras, y la principal actividad autorizada era la perforación del pozo exploratorio Himalaya 1, cuya Área de Interés se traslapa en un 100% con el PNR Bosque de Galilea. Para llevarlo a cabo era necesario la adecuación de una locación de 1,5 hectáreas, la construcción de una vía de 13,4 kilómetros en pleno bosque y de 3 zonas de disposición de material ZODME, permisos de captación de agua, vertimiento y ocupaciones de cause, entre otras acciones.

El Bosque de Galilea es considerado el mayor relicto boscoso natural del departamento del Tolima, hábitat y área clave para la permanencia de especies emblemáticas como el Oso de Anteojos, Puma, mono Churuco y Capuchino, Ranitas de cristal, especies de Palmas que se creía sólo tenían distribución para la Amazonía y Pacífico, especies de plantas carnívoras, orquídeas, entro otros. Sin duda, cualquier actividad extractiva generarían un impacto grave e irreversible sobre un ecosistema de tan altos objetivos de conservación, además de contrariar las normas ambientales clasificadas como de orden público por la ley 99 de 1993 (Art. 107), todo lo cual justifica y obliga a la autoridad ambiental a declarar la pérdida de efectos jurídicos de la licencia ambiental otorgada mediante Resolución 1564 de 2004.

Por: Edson Daniel Restrepo, periodista regional.