En la clausura de las sesiones extraordinarias del Concejo Municipal le ‘cantaron la tabla’ al alcalde Andrés Fabián Hurtado.

Concejal Rubén Darío Correa y Alcalde Andrés Fabián Hurtado

Al mandatario le cuestionaron la compra de una lujosa camioneta, el encuentro que tuvo con los habitantes de la comuna 8 en el cual no usó tapabocas ni acató otras medidas de bioseguridad, entre otras situaciones.

Este martes cerraron las sesiones extraordinarias del Concejo Municipal y en medio de la reunión, algunos concejales aprovecharon para mencionar los ‘descaches’ que, según ellos, ha tenido el alcalde de Ibagué, Andrés Fabián Hurtado.

La primera ‘puya’ la lanzó el cabildante Javier Mora, quien le dijo al mandatario local que la ciudad no está en condiciones de celebrar novenas en los barrios ni de tener camionetas lujosas porque hay que priorizar los recursos.

En respuesta, Andrés Fabián Hurtado aseguró que más austero no podía ser y que Mora no dijo nada cuando el exalcalde Jaramillo se gastó varios millones de manera innecesaria.

Pero lo que más llamó la atención fue el ‘rifirrafe’ entre el concejal de oposición Rubén Darío Correa y el mandatario local.

Correa le expuso al Alcalde de Ibagué que gracias a las 25 denuncias que interpuso se evitaron los sobrecostos en la entrega de mercados en medio de la pandemia, así como otras presuntas irregularidades que habría evidenciado en la actual Administración, resaltando la compra del carro y la actividad que efectuó en la comuna 8.

Ante las numerosas quejas que expuso el concejal Correa, Hurtado no se quedó callado y solicitó intervención para culpar al cabildante por la negativa en diferentes proyectos para la ciudad. De acuerdo con el Ingenieron Hurtado, Correa se negó a la construcción de centros de salud para el barrio Topacio, Picaleña y El Salado, así como a otras iniciativas propuestas por la administración en beneficio de los deportistas de la ciudad.

Después de esta intervención, comenzó el punto más álgido de la disputa entre los dos funcionarios públicos, donde se calentó la sesión con fuerte declaraciones en la que ambos se trataron de mentirosos. Mientras uno fue señalado de ‘pitufo mentiroso’ el otro fue tildado de engañar a la gente a través de los micrófonos.

De toma y dame, el Alcalde local avanzó con sus comentarios ofensivos contra el cabildante hasta que el presidente del Concejo, César Franco, tuvo que suspender la sesión virtual porque la situación se salió del control y otros miembros del cabildo pidieron la palabra para intervenir en el ‘rifirrafe’ que se desató entre ambos funcionarios públicos.