La inestabilidad del volcán se mantiene según indicaron integrantes del observatorio vulcanológico.

Durante la última semana, de acuerdo con el análisis y evaluación de los parámetros considerados en el monitoreo de la actividad volcánica, se evidenció que el volcán Nevado del Ruiz continúa presentando inestabilidad en su comportamiento.

La sismicidad asociada al fracturamiento de roca, aumentó en el número de sismos y en la energía sísmica liberada, con relación a la semana anterior. 

Se destaca el registro de varios episodios de sismicidad tipo drumbeat, de bajo nivel energético y de corta duración, asociada a fracturamiento de roca, los días 5 y 8 de mayo. Esta sismicidad ha estado relacionada con los procesos de ascenso, emplazamiento-crecimiento y evolución de un domo de lava en el fondo del cráter Arenas.

Esta actividad sísmica estuvo caracterizada por la ocurrencia de tremor volcánico continuo, pulsos de tremor, sismos de largo periodo y de muy largo periodo.

Estas señales presentaron niveles energéticos bajos a moderados y contenido espectral variable. La mayoría de estos sismos fueron localizados en el cráter Arenas

Algunos de ellos estuvieron asociados con emisiones de gases y ceniza que fueron confirmadas a través de las cámaras instaladas en el área del volcán y por reporte de funcionarios del Parque Nacional Natural Los Nevados y de habitantes en los alrededores del área de influencia del volcán. 

Las cámaras termográficas permitieron observar cambios en la temperatura relativa del material emitido a la atmósfera. 

La deformación de la superficie volcánica, medida a partir de estaciones GNSS (Sistema Satelital de Navegación Global) e inclinómetros electrónicos continuó mostrando una tendencia estable.

El volcán continúa emitiendo vapor de agua y gases, principalmente Dióxido de Azufre (SO2). Los niveles 1Domo de lava: es un montículo de lava (roca fundida) viscosa que se emplaza a través del conducto de emisión de un volcán hacia la superficie. La tasa de crecimiento de los domos puede variar de horas a días, años o cientos de años, y estos pueden alcanzar volúmenes de decenas de metros hasta varios kilómetros cúbicos.