Los trabajadores señalan que mientras estaban en una reunión, las autoridades realizaron la intervención en pleno centro de la ciudad.

Tras el operativo que realizó la Policía Nacional y Dirección de Espacio Público en el centro de Ibagué, en el que se llegó a un establecimiento de ropa deportiva que funcionaba como fabrica y además era la bodega de vendedores ambulantes de esta zona de la ciudad.

Jesús Cuellar, representante de los vendedores informales y afectado, expresó que esta acción genera afectación a los ambulantes, ya que estaban en una reunión y fue cuando hicieron la acción operativa.

“Esto es una persecución, nos mandaron a cerrar las bodegas donde guardamos las cosas por las que trabajamos día a día y ahora, ¿Dónde vamos a guardar eso? No tenemos donde guardarlo, eso no puede ser así y aprovecharse a hacer esto cuando estamos en una reunión”, dijo.

Asimismo, acotó que “nos cerraron las bodegas, eso es una persecución de los vendedores ambulantes, nos cerraron la comida de nuestros hijos y familiares. Aquí nos vemos afectados 300 trabajadores y no sabemos a dónde vamos a guardarlas”.

Es de recordar, que además del establecimiento comercial tuvo una suspensión temporal por tres días y se hallaron dos bodegas informales más dedicadas a estas labores de almacenamiento.