Ante la desaceleración que el año pasado registró la economía, muchos hogares vieron apretadas sus finanzas teniendo que priorizar sus gastos y quedándole mal a los bancos.

Según la Superintendencia Financiera, con corte a noviembre, entre personas y empresas adeudaron más de 436 billones de pesos y de ese dinero, 19,74 billones de pesos corresponden a deudas vencidas.

Esto es muy importante porque las obligaciones retrasadas se dispararon un 32% en tan solo un año.

Aunque las empresas son las que más se están demorando con sus pagos, las personas también están quedando mal con sus créditos de vivienda y de consumo.

La Superfinanciera resaltó que de todas formas la mayoría de las deudas están al día, y que seguirá vigilando de cerca esta situación para evitar sorpresas negativas, pues por temas como estos, las ganancias de los bancos se desplomaron un 38% entre enero y noviembre del año pasado.