Autoridades del municipio del Líbano expresaron con alivio la disminución de los casos activos con COVID-19. A finales de octubre, se tenían 24 contagios que alertaron a la ciudadanía y obligaron a implementar medidas como toques de queda y ley seca.

Actualmente, hay 12 personas que portan el virus, de modo que se pidió a los ciudadanos cumplir con rigurosidad las medidas de protección, para que la cifras se mantengan y no deban retornar a normas más estrictas. La ley seca ya no está vigente en la localidad.

“Hemos bajado mucho, lo que no nos había tocado era que se contagiaran en la administración. Pero nosotros el 22 de octubre llegamos a tener 24 casos, que nos tenían totalmente angustiados. La mayor parte de este personal ya se recuperó y estamos en 10, 12 casos, así ha sido la mayoría del tiempo”, informó Jesús Antonio Giraldo, alcalde local.

La intención de la administración, es no volver a la ley seca ni los toques de queda, ya que son medidas que han afectado gravemente la economía de los comerciantes de modo que, solo si la situación vuelve a ser crítica, se decretarán en diciembre.

“Viendo ese comportamiento vamos a mirar, yo creo y no quiero desanimar el comercio. Le pido al comercio del Líbano que mantengan las medidas de bioseguridad, para tratar de que ellos puedan vender y no cerrarles porque el único mes del año que venden mucho, venimos de nueve meses cerrados, sería uno acabar con el comercio en el Líbano”, recomendó Giraldo.