La alcaldía de Dolores posee nueve predios que sufrieron de deforestación para desarrollar actividades agropecuarias y de acuerdo con Cortolima,  la tala indiscriminada amenaza la quebrada “Aguadulce”, la cual hace parte de la cuenca del río Prado, una de las principales fuentes hídricas abastecedoras en este municipio.

 Para mitigar el daño ambiental, la Corporación implementó una actividad de restauración forestal protectora en estos 9 predios,  sembrando alrededor de 54 mil árboles de especies nativas, reforestando un total de 45 hectáreas, en aras de garantizar el suministro de agua y  también de recuperar el ecosistema perdido.

Por: Paola Rojas Gómez, periodista regional