A un mes de sufrir un accidente cerebro vascular que le provocó parálisis en la mitad de su cuerpo, la reconocida comunicadora ibaguereña ha logrado reponerse de los desalentadores pronósticos médicos. Esta es su historia.

Un agudo dolor de cabeza que empezó en la mañana del 2 de febrero de 2021 advirtió que algo no estaba bien.

La incontrolable jaqueca apareció cinco días después de que Zayra Tatiana Orjuela, reconocida comunicadora de Ibagué, se practicara una histerectomía que resultó exitosa y sin novedades.

Los médicos le dijeron que era una reacción normal de la anestesia, sin embargo, con el paso de las horas la molestia se volvió insoportable y apareció otro síntoma que encendió las alarmas: adormecimiento en la zona izquierda de su cuerpo.

Se trasladó de inmediato a la Clínica Tolima. Allí, empezó a decaer y minutos antes de que le hicieran un tac cerebral, se derrumbó y convulsionó.

La jaqueca no estaba asociada con la anestesia, se trataba de algo mucho más grave que acaba de suceder en su cabeza.

La película se le borró. Estuvo internada en cuidados intensivos y luego de siete días volvió a recobrar su conciencia. En un principio pensó que se trataba de una pesadilla de esas que se acaban en un abrir y cerrar de ojos…sin embargo era su nueva realidad: había sufrido una trombosis que le había paralizado medio cuerpo.

“Aprendí a caminar de nuevo”

Ha pasado más de un mes y mientras que unos pacientes en su mismo estado permanecen postrados en una cama, Zayra se recuperó milagrosamente.

Como si fuera una bebé recién nacida, tuvo que empezar cero. Aprendió a caminar de nuevo, a fortalecer su motricidad y a no dejarse caer.

Siempre debe estar acompañada. Como está consumiendo anticoagulantes, ni de riesgos puede sufrir alguna herida abierta porque podría desangrarse y morir.

Toma siete pastas al día y se tiene que aplicar dos inyecciones. Termina rendida con las terapias que le hacen tres veces a la semana en donde la ponen a caminar por una línea recta, a fortalecer su zona izquierda con ejercicios de peso y hasta a gatear.

Su madre y hermano son sus ángeles, cuidan de ella día y noche. Ellas, junto a su hijo y esposo se han convertido en su fortaleza más grande para salir adelante y también los responsables de mantenerla con esa buena energía que la caracteriza. 

Una de sus pasiones podría ser prohibida

En un mes, recibirá los resultados de los exámenes que revelarán las causas de su accidente cerebrovascular.

Los especialistas están a la espera de ese diagnóstico para indicarle si puede seguir jugando uno de los deportes que más la apasionan: el baloncesto.

Zayra podría quedar por el resto de su vida con anticoagulantes, de ser así, deberá olvidarse por completo de los deportes de contacto.

“Aprendí a tomar pausas”

Esta mujer no encuentra palabras para describir lo que le pasó. No asocia su condición con una desgracia o pesadilla, más bien la considera como una nueva oportunidad para replantear muchas cosas de su vida, entre ellas, aprender a tomar pausas cuando el cuerpo las pide y dejar tanto corre corre de su diario vivir.

En medio de lágrimas agradece cada mensaje, cada video, cada llamada que le enviado durante su proceso de recuperación. Con emoción y mucha alegría agradece el cariño que le han expresado, incluso de personas que no eran cercanas a ella. Esta ha sido la gasolina para no caer y seguir adelante.

Después de estar al borde de la muerte por cuenta de una trombosis, la comunicadora ibaguereña Zayra Tatiana Orjuela se recupera milagrosamente de uno de los episodios más duros de su vida. 

A un mes de sufrir el accidente cerebro vascular que le provocó parálisis en la mitad de su cuerpo, esta mujer ha logrado reponerse de los desalentadores pronósticos médicos a punta de tesón, perseverancia y muchas sonrisas que ni siquiera claudican en medio del dolor.