Madres de familia advierten sobre malas prácticas en la IPS Passus, que atiende a menores con discapacidad física y cognitiva en la capital del Tolima.

Claudia Orozco, madre de uno de los menores que reciben tratamiento en la entidad señaló que, asegura que su hijo presenta  hematomas en varias partes de su cuerpo, marcas de cuerdas en sus muñecas y en una ocasión como “tratamiento para calmar su hiperactividad” fue enrollado en una colchoneta mientras le arrojaban agua en la cara.

"Otras madres han denunciado que sus hijos reciben golpes, aparecen con marcas de cuerdas en las manos y los tobillos, como si los amarraran a las sillas, a una niña de un golpe le partieron uno de sus dedos” indicó la denunciante.

Y agregó “los golpean, en varias partes del cuerpo, como muchos de ellos no pueden expresar lo que sienten se aprovechan de la situación".

Los niños con discapacidades físicas o cognitivas son remitidos por las EPS para recibir tratamiento en la entidad, permanecen varias horas al día en el centro sin que sus padres puedan ingresar para verificar su estado.

“No nos dejan entrar para ver como están, nosotros llevamos más de un año solicitando a las directivas un informe donde expliquen qué actividades les hacen a los niños,  pero nunca nos han dado respuesta”.

Por su parte, el diputado Jorge Armando Duque, pidió a las autoridades del Tolima "asumir, con el rigor que amerita, el seguimiento y la vigilancia a esta entidad que brinda atención especializada a la población en condición de discapacidad".

De igual forma, pidió poner en marcha mecanismos que garanticen el cuidado y la protección de niños, niñas y adolescentes, con mayor énfasis en la población vulnerable, a fin de prevenir los casos de tortura, como los que se presentaron en la fundación Peces Vivos.

Por: Paola Rojas Gómez, periodista regional.