En auditoría especial realizada a la vigencia 2017, la Contraloría municipal encontró un presunto detrimento patrimonial por $216 millones en la Secretaría de Gobierno de Ibagué.

Ariel Augusto Medina, titular del organismo de control indicó que se encontraron hallazgos de posible incidencia fiscal y disciplinaria por el contrato de arrendamiento de un inmueble que nunca fue utilizado.

Esta cartera suscribió el contrato de arrendamiento 1584 con Germán Alberto León por 95 millones de pesos, con el objetivo de poner en funcionamiento el centro de protección a personas como parte de la implementación del código de policía, el cual tuvo una adición de $44 millones.

Según Medina, se evidenció que el contrato en su primera adición tuvo un incremento injustificado del canon de arrendamiento, el cual pasó de 11 millones a 14 millones mensuales.

“Eso hace que el valor se modifique sin tener una justificación alguna. Normalmente cuando se hacen las adiciones se hacen por tiempo y prorroga en valor, pero las condiciones deben ser la misma.” indicó.

La contraloría encontró que en el 2018, se encontraron contratos adicionales lo que generó el presunto detrimento de más de 200 millones.

“Las controversias ya fueron presentadas en el informe que presentamos como preliminar, las cuales no sustentan justificación alguna para los incrementos de valores y para la tenencia de ese bien arrendado cuando nunca ha sido utilizado y puede causar detrimento patrimonial” finalizó el contralor.

Por: Paola Rojas Gómez, Periodista Regional