Los campesinos piden apoyo para comprar el grano porque necesitan pagar los créditos que pidieron en los bancos para poder sembrar y necesitan de la solidaridad de los ibaguereños.

Los campesinos de las veredas La Tigrera y el Encanto de Cajamarca se cansaron de tener sus cosechas represadas y esperar a que les compren a buen precio, por eso decidieron tomarse el Parque Murillo Toro para comercializar “por libritas” y tratar de hacer rentable su trabajo.

Los campesinos llegaron al Parque esperando comercializar como mínimo 1.500 libras de frijol entre los transeúntes y conductores de vehículos, porque afirman que es mucho más rentable vender así, que esperar a los intermediarios que les están pagando la mitad de lo que verdaderamente vale.

Según advirtió Luz Ángela Ordoñez, cultivadora de fríjol, “Esperamos el apoyo de todos los ibaguereños porque tenemos represadas las cosechas y queremos pagar los créditos con los bancos para seguir teniendo cómo cultivar”.

Los productores de fríjol estarán durante todo el día en el Murillo Toro esperando el apoyo y la solidaridad de los ibaguereños.