El abuelo se aferra a la vida y su familia pide que Medimás asuma los gastos de la hospitalización en casa.

El drama lo está viviendo la familia de un hombre de 85 años de edad quien se contagió de COVID-19 por el contacto estrecho con un familiar suyo que sufrió la enfermedad y aseguran que desde que comenzó a evidenciar los síntomas han tratado de comunicarse con la EPS pero no ha sido posible.

Al ver que su salud se complicó la familia le hizo la prueba de manera particular y con la confirmación del virus, lo llevaron el lunes al hospital Federico Lleras donde el médico les habría dicho que no había nada que hacer por su edad y les dieron a escoger entre intubarlo a sabiendas que no sobreviviría o de aplicar un sedante mientras moría para aliviar un poco su dolor.

Los familiares de Luis Enrique Beltrán Beltrán dicen que optaron por sedar al abuelo creyendo que era cuestión de horas, pero éste se aferró a la vida y prefirieron tenerlo en su casa bajo tratamiento médico, pero a pesar de sus esfuerzos por comunicarse con Medimás no lo han vuelto a valorar y piden ayuda para que pueda salvarse.

“El tema es que todos los gastos han sido impresionantes, porque la eps no nos cubre absolutamente nada, ahora lo que necesitamos es continuar prestando el servicio de enfermería, que se le viene prestando de forma particular, eso aliviaría la carga económica y podríamos seguir comprando todo lo demás”, señala su nieta

Esta familia asegura que son muchas las personas que están viviendo el drama de la prioridad de las camas UCI y aunque lo entienden, advierten que es muy complejo ver morir a sus seres queridos porque las EPS no los atienden como deberían, aun cuando estos batallan por seguir aferrados a la vida.