El aviso resultó en el suelo completamente roto y aunque comerciantes del sector dicen que fue el viento, el Gerente de la Gestora Urbana señaló que están investigando.

El hecho se presentó pasada las 3 de la tarde del martes 2 de febrero cuando los transeúntes y trabajadores de los almacenes cercanos de la plazoleta Darío Echandía se asustaron al escuchar el estruendo de algo que se cayó y se rompió y al salir a verificar, se encontraron con que el famoso letrero luminoso ubicado por la Gestora Urbana estaba en el suelo completamente destruido.

Las fotos del aviso de inmediato circularon por páginas, redes sociales y cadenas de whatsapp y las reacciones del hecho no se hicieron esperar incluso por el mismo gerente de la Gestora Urbana, Didier Blanco, quien lamentó el hecho asegurando que se inició la investigación para determinar si se trató de un acto de vandalismo de opositores del Gobierno de Ibagué Vibra.

El funcionario señaló que está completamente desilusionado porque el aviso fue un regalo suyo a la ciudad y aunque no representaba un detrimento patrimonial por cuanto no fue adquirido con recursos de la Gestora, si era un mobiliario adquirido para embellecer la ciudad.

“Me rehúso a pensar que sea un tema de vandalismo, me rehúso a pensar que alguien pueda destruir algo que a nadie le hace daño, que lo único que hacia era intentar propiciar un espacio agradable, el cual estaba tomado por indigentes y consumidores, solo espero que no haya habido intensión alguna para dañarlo”, expresó Didier Blanco.

Pese a los señalamientos del Gerente de la Gestora Urbana, el trabajador de un almacén de a Plazoleta aseguró que el aviso luminoso de Ibagué en realidad se dañó por cuenta de un fuerte ventarrón que lo precipitó al piso y no se trató de un acto intencional.

“Yo estaba ahí por la ventana mirando cuando hubo un ventarrón y tumbó el aviso. Sin embargo yo estuve pendiente para ver si sabía alguno que lo hubiera tumbado y no había nadie, parece imposible pero cierto”, aseguró el comerciante.

Los hechos siguen siendo materia de investigación por parte de las autoridades que continúan verificando si se trató de fuertes vientos o de un acto de vandalismo.