Luego de haberse suspendido el servicio durante tres días, los operarios del Ibal pudieron superar la emergencia que provocó una creciente súbita en la quebrada Las Perlas.

 

Con la disminución de las lluvias en la parte alta del Cañón del Combeima, la Empresa Ibaguereña de Acueducto y Alcantarillado, IBAL logró restablecer el funcionamiento de los 10 distritos hidráulicos de la capital del Tolima que se vieron afectados desde el viernes cuando una palizada que arrastró la quebrada Las Perlas obligó a suspender la captación de la bocatoma.

Según se había informado, debido a las fuertes lluvias registradas este fin de semana, dos crecientes súbitas habrían llegado desde la quebrada Las Perlas, arrastrando el material que provocó el cierre de la estructura hidráulica y la suspensión del suministro de agua potable durante los tres días.

De acuerdo con la información oficial de la empresa, el río Combeima alcanzó niveles de turbiedad de hasta 80.000 unidades lo que la hacía imposible de tratar y dejar apta para el consumo humano, por lo que se decidió suspender hasta que el río tuviera bajos niveles de turbiedad, los cuales se lograron hasta la tarde de este domingo cuando se dio orden de volver a captar agua.

"Informamos que se ha normalizado la captación del agua en la bocatoma Combeima, estamos trabajando en el tratamiento de la misma para garantizar el agua potable en cada una de las viviendas de nuestros usuarios", indicó Harold Rodríguez, director Operativo de la empresa.

Con la operación normal de las bocatomas Cay y Chembe, el Ibal pudo garantizar la suficiente agua para suplir la demanda de la ciudad, aunque la noche de este domingo 21 de febrero se hicieron públicas imágenes de la calidad del agua que finalmente recibieron los ibaguereños lo que generó inconformismo porque era completamente negra.