Vendedor de mazamorra ataca a residentes en Ibagué que le piden bajar el volumen del parlante
- por Kelly Perdomo
En video quedó captado el momento en que el mazamorrero rompe el vidrio de la ventana de un conjunto de la Samaría.
Un alarmante acto de intolerancia ha sacudido la tranquila comunidad del sector Samaria en Ibagué, cuando un vendedor ambulante de mazamorra se volvió violento tras recibir una solicitud para disminuir el volumen de su parlante. El incidente ocurrió en el conjunto residencial Bio, dejando a los residentes conmocionados por la agresión verbal y física.
El desencadenante de la confrontación fue un habitante de Bio, quien trabajaba desde casa y se encontraba en medio de una importante conferencia virtual. Al darse cuenta de que el estridente sonido de la mazamorra interfería con su trabajo, se acercó al vendedor para pedirle que bajara el volumen del parlante o considerara ubicarse en otra parte, sin embargo, la solicitud no fue bien recibida por el comerciante, quien reaccionó de manera agresiva, comenzando con insultos y luego empeorando la situación al lanzar una piedra que rompió una ventana de la vivienda del residente.
Este incidente, lamentablemente, no es un hecho aislado. Una mujer del sector reportó que días atrás, un episodio similar ocurrió en el conjunto Ática. En esa ocasión, otro residente le pidió al mismo vendedor que redujera el volumen de su parlante. La respuesta fue igual de agresiva, incluyendo insultos y amenazas con un machete.
Vendedor de mazamorra ataca a residentes en Ibagué que le piden bajar el volumen del parlante
— ONDAS DE IBAGUÉ 1470AM (@Ondas1470) September 4, 2023
En video quedó captado el momento en que el mazamorrero rompe el vidrio de la ventana de un conjunto de la Samaría. pic.twitter.com/CnDOCCBPvt
Los residentes del sector están preocupados por la actitud del vendedor, describiéndolo como grosero, agresivo y peligroso. Argumentan que todos tienen derecho a trabajar, pero también enfatizan que la presencia constante del parlante a todo volumen durante largos períodos de tiempo resulta molesta e incómoda para quienes residen en la zona.
La comunidad espera que este caso de intolerancia sirva como un recordatorio de la importancia de la convivencia pacífica y el respeto mutuo en las comunidades urbanas, además que las autoridades le presten atención a este hecho que ya deja daños materiales.