El destacado intelectual tolimense y poeta deja un legado de servicio y cultura a sus 88 años.

Doctor en derecho, ciencias sociales y políticas por la Universidad Externado de Colombia, fue un destacado profesor universitario, decano de administración de empresas y rector de la Universidad del Tolima. Además, desempeñó importantes cargos como gerente del Seguro Social, gobernador encargado del Tolima y secretario de Gobierno y Hacienda. En 1989, se convirtió en el primer alcalde elegido popularmente de Ibagué, donde implementó una visión moderna y progresista de la ciudad.

Gutiérrez Quintero no solo destacó en la esfera política, sino también como escritor y poeta. En 1999, publicó su primer libro, De mi dimensión a la luz, seguido por Francisco José Peñaloza Castro en 2008, y su poemario Los versos de mi vida en 2010, editado por Caza de Libros. Su producción literaria también incluye trabajos inéditos en poesía y ensayos, y fue coautor del Estudio de factibilidad del programa de administración de entidades bancarias y financieras.

Su vínculo con la historia y la literatura fue profundo, siendo miembro activo de la Academia de Historia del Tolima. Su pasión por las letras fue compartida con su amigo cercano, el exsenador y exministro Alberto Santofimio Botero. La última aparición pública de Gutiérrez Quintero fue precisamente en el lanzamiento del libro de Santofimio, Mi viaje con la palabra, este mismo año, a pesar de su delicado estado de salud.

En una emotiva carta, Santofimio expresó su dolor por la partida de su amigo: “Armando Gutiérrez Quintero, más que un amigo entrañable, fue un hermano espiritual de toda la vida. Nos unieron las ideas liberales, la pasión por la historia, la filosofía y la literatura, y dentro de esta la poesía como perenne compañera de viaje, y nuestra apasionada y bohemia compañía de la música, particularmente, del bolero, del cual fue Maestro y conocedor insuperable.

Escribí, con afecto y deleite, el prólogo a su obra "TIZONES ENCENDIDOS", que resume toda su producción poética. Fue sin duda el emblemático "Soñador de la Rosa" y dejó en la afortunada visión de sus palabras, retazos de enorme y romántico corazón. Con este mismo Amó y sirvió a Ibagué y tuvo desde la Rectoría de la Universidad del Tolima y de la primera Alcaldía por elección Popular. Desde allí, puso en práctica una moderna y progresista visión de ciudad, que ya antes había impulsado como secretario de gobierno   de Pacho Peñalosa.

Mucho más tendré que decir sobre el legado de Armando, nuestra amistad y nuestra lucha leal, asumiendo ahora adolorido el golpe de su partida, no por esperada menos implacable. Solo atinó a decir que fuimos compañeros, hermanos y entrañables amigos, con una fidelidad conmovedora”.

Su cuerpo será velado este domingo 15 de septiembre en el Centro de Convenciones Alfonso López Pumarejo a partir de las 11 de la mañana. Las exequias se llevarán a cabo el lunes 16 de septiembre a las 9:00 a.m. en la Catedral de Ibagué, y la cremación se realizará en el Parque Cementerio Los Olivos.

Con su partida, Ibagué pierde a un líder visionario, un intelectual comprometido y un amante de la cultura y la poesía. Su legado, tanto en el ámbito político como literario, perdurará como testimonio de una vida dedicada al servicio y al arte.