Edward Alberto Bonilla Guarnizo, sargento retirado de la Policía, admitió su responsabilidad en los cargos que le imputó la Fiscalía por los delitos de concierto para delinquir, estafa agravada, uso de documento falso y falsedad en documento privado.

Presuntamente, el hoy procesado pertenece a una organización delictiva dedicada a la estafa bajo la modalidad de venta, alquiler y empeño de vehículos.

Se presume que Bonilla Guarnizo se ganaba la confianza de las víctimas aprovechando su posición como integrante de la Fuerza Pública.

Un fiscal de la Estructura de Apoyo asoció 12 casos en los que estaría implicado el suboficial, quien fue vinculado tras un arduo trabajo investigativo e interrogatorios a indiciados de esta misma estructura criminal que actualmente se encuentran privados de la libertad.

Por: Juan Manuel Escobar, periodista judicial.