Impotencia, tristeza, rabia y dolor, es lo que una mujer de aproximados 35 años siente cada vez que los cobradores gota-gota llegan a su casa a insultarla, a amenazar de muerte a sus padres, a su esposo y a los dos hijos de ella, y todo, porque debe más de 6 millones de pesos a 15 empresas dedicadas a la usura en Ibagué.

Su historia inició hace un par de años cuando una de sus amigas la relacionó con un prestamista dedicado a la usura, quien le prestó 200 mil pesos para pagarle diariamente 10 mil, lo que significa que este préstamo alcanzaba un interés del 25 por ciento, situación que la obligó prácticamente a conseguir otro préstamo de las mismas características para poder cumplirle con los intereses al anterior, y de esta  manera, se endeudó en más de 10 millones de pesos, alcanzando a adquirir deudas con 25 empresas gota-gota.

Los insultos pasaron a amenazas, los reclamos ya se convirtieron en empujones y los cobros con altanería cada vez intimidaban más y más a ella y a su familia, hasta el punto de abandonar su casa y acudir a la piedad de su familia, para trastearse y vivir con sus padres, después de muchos años de haber salido del hogar materno.

La mujer, de quien no revelamos su identidad por petición de ella misma, logró acabar con la deuda de 10 empresas de las que tenía acabando con su vida y los otros que quedaron en el tintero, iniciaron lo que para ella, hoy se ha convertido en la pesadilla más grande de su vida.

Esta persona hoy amaneció con intenciones de acabar con su vida para terminar de raíz con esos problemas. Acudió a las instalaciones de esta emisora y entabló conversación con nuestro equipo periodístico, cambiando de idea y asumiendo su responsabilidad en los hechos.

A esta hora, ella se encuentra en la Fiscalía, instaurando un denuncio contra los cobradores gota-gota, los mismos que han logrado acabar con su vida laboral, haciéndola despedir de cada empresa donde logra encontrar trabajo.

Por: Juan Manuel Escobar, periodista judicial.