El vigilante murió en un accidente de tránsito cuando se desplazaba por el sector de la Glorieta de Mirolindo.  

Luego de más de 20 días que se presentó el trágico accidente en el que se vio involucrado un vehículo de marca Nissan March y un ciclista resultó muerto, se conocen nuevos detalles del procedimiento de ley que realizaron los denominados agentes azules de tránsito. 

Según Luis Fernando González, directivo de la empresa LFG Asesores Jurídicos, en el informe oficial, los agentes azules de la movilidad no habrían reportado el estado de alicoramiento de Gustavo Germán Alonso, conductor del vehículo Nissan de placa FOL 006.   

“Si la familia estuviera bien asesorada habría un procedimiento conforme lo ordena la norma, tenían que haberle exigido al guarda que adelantara el procedimiento o su apoderado tenía que dirigirse a la Fiscalía a solicitar la prueba, si esto no se hace a tiempo, la sangre guarda el alcohol durante 24 horas”, dijo González.   

Para González en estos casos un jurista debe solicitar a un fiscal o un policía la orden para que se practique la prueba en donde se encuentre recluida la persona.  

“Ahora piden celeridad a la fiscalía, pero creo que hay una mala asesoría o un desconocimiento de los guardas pues ellos apenas están empezando a cumplir funciones de policía judicial”, sostuvo.  

En el lugar de los hechos, Juan Carlos Cofles, de 33 años, de profesión vigilante pereció de manera instantánea producto del fuerte impacto que sufrió cuando el vehículo lo embistió de frente. 

Para esta tarde se espera que los familiares de Cofles realicen un plantón en el sector de la Glorieta de Mirolindo.