Diego Andrés Guerra, mandatario local, indicó que de manera preocupante muchas personas de su municipio no quieren acatar las medidas sanitarias ante la pandemia del COVID-19.

La desobediencia social es una de las problemáticas que se viene evidenciando en varios municipios del departamento, abundan los desórdenes en las poblaciones, como fiestas clandestinas y las tan sonadas peleas de gallos.

Según el alcalde Diego Andrés Guerra, en Rovira hay preocupación por  estos hechos, pues afirmó que las personas no quieren tomar conciencia de la situación que enfrenta el mundo.

"Nosotros estamos tratando de tomar más controles, teniendo en cuenta que tenemos alta incidencia en coronavirus, ya tenemos más de 12 casos, hemos estado haciendo seguimiento a los casos y hemos extremado medidas de seguridad para evitar que se expanda el virus en más sectores".

Frente al estado de los pacientes, el mandatario expuso que todos están bajo vigilancia con el fin de tener control de los cercos epidemiológicos.

"La mayoría de nuestros casos se han recuperado,  ya hemos estado levantando los cercos epidemiológicos ya que hemos realizado los procesos y muchos han salido negativos y los positivos están en aislamiento sin sintomatología".

Guerra señaló que también se han incrementado los puestos de control en diferentes sectores, sin embargo, se siguen recibiendo quejas por la comunidad.

"Hemos recibido quejas de peleas de gallos, fiestas de quince años y reuniones clandestinas, nuestro pie de fuerza llega a los sectores pero en la mayoría la gente se esconde y es por eso que hemos llamado la atención a la población para evitar estas situaciones".

Por Edson Daniel Restrepo.

Finalmente, Guerra indicó que ha sido una tarea difícil en esta población, por lo que vienen implementando el 5x2, que implica 5 días de actividades económicas y 2 de confinamiento.