Según Olga Lucía Alfonso, el problema del agua en Ibagué no es la cantidad de agua para captar, sino la deficiente distribución del sistema hidráulico al interior de la ciudad.

Según la directora general de Cortolima, Olga Lucía Alfonso, el Instituto Ibaguereño de Acueducto y Alcantarillado-IBAL- tiene varias concesiones de agua que suman 3.309 litros por segundo, que permitirían abastecer hoy a toda la ciudad durante varios años.

"Voy a explicar con plastilina para que cualquier niño de escuela lo entienda, el problema del agua en Ibagué no es la cantidad de agua para captar, es la deficiente distribución del sistema hidráulico, por eso me extraña que un ingeniero no entienda que las concesiones no sé otorgan por un tiempo determinado, dependiendo si estamos en invierno o en verano", afirmó Alfonso.

El grave problema, según la directora de Cortolima, es la deficiencia de las redes, que permiten la fuga o desperdicio del agua en más de un 40 por ciento y producto del deterioro progresivo del sistema hidráulico.

En la quebrada Corazón según los estudios técnicos de un equipo idóneo de ingenieros con mucho experiencia y tiempo de trabajo con la Corporación, se logró determinar que la solicitud del Ibal de concesionar 357 litros por segundo, de la quebrada Corazón, excede los límites permitidos en el Estudio Nacional del Agua, y originaria una condición crítica para esta corriente hídrica, siendo este un argumento fundamental y técnico para no entregar está concesión solicitada por el IBAL.

La directora de Cortolima se apoyó hoy en la rueda de prensa, de todo su equipo técnico y jurídico, todos ellos con amplia experiencia , por ello la decisión de no conceder esta concesión es  técnica con análisis Jurídico muy profesional.

“Mientras yo esté en la Corporación haremos lo correcto frente a lo conveniente y está decisión no es política, ni le hace daño a la ciudad, por el contrario cuida y conserva el recurso hídrico del Municipio”, finalizó diciendo la funcionaria.